La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) está trabajando en el diseño de una nueva generación de satélites. Radio UNNE dialogó con Juan Pablo Cuesta González, jefe del proyecto SAOCOM, que tiene como objetivo brindar información satelital de suelos, aguas y vegetación, así como prevención y gestión de catástrofes.
Entre los años 2018 y 2020, desde Argentina se lanzaron dos satélites de observación de la Tierra cuyo radar fue fabricado en el país. Este proyecto espacial, denominado SAOCOM 1, se trata de un desarrollo único en el mundo, capaz de generar información útil para prevenir, monitorear, mitigar y evaluar catástrofes naturales o antrópicas; con beneficios para la actividad productiva nacional.
“Estamos con la experiencia que ganamos en la primera generación, que fue todo un desafío. Argentina con esto se posicionó como líder a nivel global, solamente Japón tiene satélites de este tipo. Tanto Europa como Estados Unidos están desarrollando ahora sus propios sistemas, pero todavía no están en vuelo, no están operativos”, explicó Cuesta a la 99.7.
“El objetivo que tenemos es dar continuidad a los satélites que están operando hoy para mejorar los datos que estamos brindando desde CONAE; que tienen que ver con la gestión de emergencias asociada a catástrofe, sean incendios, erupciones, terremotos, deslizamientos, humedad del suelo. A partir de estas imágenes satelitales se coopera con el sector productivo”, detalló el ingeniero.
SAOCOM 2
Uno de los objetivos centrales de la nueva misión satelital, que se pretende que esté en órbita a fines de esta década, será brindar una continuidad de la información radar en banda L que hoy ofrece a los usuarios. “La misión y visión de la CONAE es poder formar un tejido industrial, público y privado, dentro de la Argentina para ser competitivos en el exterior”, dijo Cuesta.
El ingeniero explicó que cuando se habla de banda L hace referencia al espectro electromagnético y su capacidad de penetración en terreno. Puede atravesar el suelo, el follaje, la vegetación y realizar mediciones más precisas. Su amplitud y profundidad permite generar imágenes de mayor calidad, y por eso fue la elegida para desarrollar los SAOCOM.
Esta tecnología da la posibilidad de hacer mapas en tres dimensiones del terreno con mucha precisión. Cuando se superponen tomas realizadas en diferentes momentos puede detectar cambios o deformaciones. Los datos de SAOCOM son gratuitos en el territorio argentino y están disponibles desde la web de la CONAE.
Cuesta destacó que otro de los productos novedosos que se ofrece es la generación de mapas satelitales para la detección temprana de fugas en redes de agua potable; ayudando a reparar las pérdidas antes de que sean visibles en superficie y que generen mayores afectaciones en los usuarios.
“La misión y visión de la CONAE es poder formar un tejido industrial, público y privado, dentro de la Argentina para ser competitivos en el exterior”, dijo Cuesta.
Para desarrollar la constelación SAOCOM U, la Conae articulará las capacidades de instituciones públicas, y de empresas del sistema nacional de ciencia y tecnología, como Invap -su principal proveedor-, que estará a cargo del diseño y la construcción de la plataforma de servicios de los satélites y de la electrónica central del radar. El diseño del instrumento SAR y la antena seguirán a cargo de la propia Conae y de la firma VENG.
Observación del mar
Cuesta destacó que también se encuentra en marcha la misión SABIA-Mar, que actualmente está desarrollando la agencia espacial argentina, con la participación de instituciones públicas y empresas del sistema científico y técnico nacional, y que consiste en un nuevo satélite argentino de observación de la Tierra orientado al estudio del mar y las costas de la Argentina y América del Sur.
Su objetivo principal es proveer información y productos para el estudio de la productividad primaria del mar, los ecosistemas marinos, el ciclo del carbono, la dinámica de las aguas costeras, el manejo de recursos pesqueros y la calidad del agua en costas y estuarios. Brindará información valiosa para los ámbitos científico, productivo y de toma de decisiones.
