El Mgter. Gustavo Fernández, docente-investigador de la UNNE, participó en la jornada «Enfoque Multidisciplinar de las Enfermedades Parasitarias de Relevancia en América del Sur» de AUGM en la que expuso sobre los avances en el abordaje de la Hidatidosis en la provincia de Corrientes y el país. Destacó el trabajo bajo el enfoque de «Una Salud» que posibilitó mejorar la detección y abordaje de casos.
Las jornadas fueron organizadas por el Comité Académico de Salud Animal de la Asociación de Universidades Grupo Montevideo (AUGM) y se concretó en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de La Plata (Argentina) con participación virtual a través de la transmisión en el canal de YouTube AUGM Oficial.
En las jornadas se abordó la situación de distintas parasitosis zoonóticas y enfermedades zoonóticas y transmitidas por vectores.
Una de las temáticas expuestas fue la Hidatidosis y sobre ello expuso el Mgter. Fernández en el marco de la disertación “Una Salud en Hidatidosis: un trabajo interdisciplinario para crecer, vigilar y prevenir”.
El profesor Fernández es Bioquímico, Magíster en Salud Pública y Enfermedades Transmisibles, Especialista en Salud Pública y Diplomado en Geomática Aplicada a la Salud. Desempeña tareas de docente e investigación en la UNNE, en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura, en el Instituto de Medicina Regional y la Facultad de Medicina. Además es vocal de la Asociación Argentina de Hidatología.
«La Hidatidosis es una muestra clara de la importancia de trabajar bajo el enfoque de UNA SALUD», resaltó el especialista de la UNNE durante su disertación, en referencia al concepto que expone que la salud humana y la sanidad animal son interdependientes y están vinculadas a los ecosistemas en los cuales coexisten, donde cualquier alteración en uno de esos ambientes, impacta directamente en los demás.
La enfermedad
En ese aspecto, recordó que la hidatidosis es una enfermedad producida por un parásito, Echinococcus granulosus, que transmite principalmente el perro a través de su materia fecal, y que puede contaminar el ambiente y afectar a los humanos.
El ciclo más común de transmisión se registra entre perros y ovejas, pues los perros se infectan al consumir vísceras frescas o residuos de cadáveres de ovejas infectadas que contienen quistes. Posteriormente, al depositar las heces en el suelo, contaminan las tierras de pastoreo, o el agua, y las ovejas vuelven a infectarse cuando pastan, reproduciéndose así el ciclo.
En Argentina la enfermedad alcanza los mayores niveles endémicos en las provincias patagónicas, en la provincia de Buenos Aires y en Corrientes.
En la provincia de Corrientes predomina la enfermedad con casos autóctonos en la región sureste y que incluye los departamentos de Mercedes, Curuzú Cuatiá, Paso de los Libres, Sauce y Monte Caseros, que coindice con la región productora ovina, como principal factor epidemiológico. Se han detectado caso en otras regiones de la provincia, pero no se demostró que el ciclo este instaurado.
Acciones favorables
“Tanto en la provincia de Corrientes como a nivel país se está trabajando de manera interdisciplinaria, con diferentes dinámicas, pero está claro el concepto de cómo abordar esta compleja problemática” destacó.
Recordó que Argentina cuenta con un Plan Nacional para el Control de la Hidatidosis y Corrientes también tiene su Plan Provincial de Hidatidosis, y en ambos se considera que esta enfermedad representa una prioridad para la salud pública, que prevén objetivos específicos y acciones concretas para el diagnóstico, tratamiento, prevención y la vigilancia epidemiológica.
Pero, según destacó, la principal fortaleza en el abordaje de la Hidatidosis es el trabajo interinstitucional e interdisciplinario, con participación, en el caso de la provincia de Corrientes, de distintos estamentos gubernamentales (Salud Pública, Producción y Educación) instituciones como UNNE, INTA, sociedades rurales, productores, asociaciones civiles, y la comunidad en general.
«Esa es una fortaleza relacionada al concepto de UNA SALUD» indicó y agregó que sólo se necesita mejorar la dinámica de las acciones de las instituciones mencionadas que, por la pandemia, quedaron desatendidas.
Comentó que las provincias del país cuentan con equipos y estructuras, en mayor o menor medida, como en todas las patologías, algunas muy desarrolladas y otras no tanto, pero que en sumatoria permiten una mayor detección de casos. “Se ha mejorado la detección, el registro y la respuesta, pero aún debemos crecer en esfuerzo y acciones”, aseguró.
«No sé podrá eliminar la enfermedad, pero sí controlarla, tener aceitados los circuitos de respuesta ante casos para que los detectados recuperen su calidad de vida», remarcó sobre la forma de trabajo que se está desplegando en la provincia.
Detalló que se han conformado en diferentes regiones de la provincia de Corrientes, equipos de salud humana y veterinaria, equipos de producción y comercio ganadero, y equipos de educación, los que a su vez interactúan entre sí y con distintos actores de la comunidad.
La integración de estos equipos se complementa con la tarea de grupos de investigación, vigilancia, comunicación, medioambiente y derecho, entre otros que aportan al enfoque amplio de la enfermedad y la estrategia de UNA SALUD.
Experiencias favorables
El referente de la UNNE destacó algunas de las iniciativas que desde la provincia están posibilitando una mejor detección de la enfermedad.
Por un lado, la estrategia de catastro ecográfico en la pesquisa sobre todo en escuelas rurales, fortalece la detección temprana de casos asintomáticos.
Otra experiencia es la búsqueda de casos desde la notificación de faena, algo que se inició en Corrientes como pionera en el país y que hoy es incorporada a otros equipos de salud y que consiste en la detección de Hidatidosis en frigoríficos con posterior notificación a otras instituciones para su intervención.
«Estas diferentes estrategias posibilitaron un mayor número de casos detectados en los últimos años, no por un aumento de la enfermedad sino por una mejor pesquisa» resaltó.
Planificación e intervenciones
El Mgter. Fernández expuso la importancia de las diversas instancias que involucra el abordaje de la Hidatidosis desde la mirada de UNA SALUD.
En atención del primer nivel de salud, es básica la educación sanitaria a la comunidad, que constituye la base de la prevención primaria de la hidatidosis.
“Lo puede hacer cualquier persona preparada, que aprenda y se forme, y que esté en relación con los equipos de trabajo. Hay que instruir con lo básico y con los conceptos adecuados para que la comunidad entienda qué debe hacer para evitar la enfermedad», explicó.
La prevención secundaria está a cargo de los equipos de salud, con ecografías, análisis, testeos y otros recursos.
Por último, la prevención terciaria es el tratamiento médico o quirúrgico, donde intervienen equipos profesionales.
Rol de las disciplinas
Según detalló, todas las disciplinas o áreas de trabajo tienen un rol clave en la lucha contra esta enfermedad parasitaria.
La medicina veterinaria tiene un rol en especial a través de la desparasitación canina que debe ser metódica y sistemática para lograr el impacto esperado.
Pero también cumplen una labor clave los veterinarios en la faena en frigoríficos para detectar en ovinos y bovinos el parásito. La atención clínica de mascotas en consultorios veterinarios, es importante monitorear también esta enfermedad.
En el caso de la participación de los médicos, se centra principalmente en la prevención terciaria, pero también pueden colaborar en otras instancias, como en prevención secundaria en ecografías y testeos, o en prevención por medio de charlas y capacitaciones a los comunicadores y equipo de salud.
El Laboratorio de Análisis acompaña todas las actividades en el abordaje de la enfermedad mediante testeos comunitarios, diagnóstico en los casos sospechosos, seguimiento durante el tratamiento, etc. No sólo realiza análisis, sino que puede contribuir con charlas o devoluciones a las personas que se realizan los testeos, entre otras acciones.
Educación y comunicación
El Mgter. Fernández resaltó que se debe pensar en incluir el tema en la educación escolar en todos los niveles, incluirlo en la currícula, en especial en zonas endémicas.
“En los lugares endémicos, cualquier sitio, cualquier encuentro, son espacios propicios para dar a conocer la enfermedad y las medidas de prevención”, expuso.
Agregó que realizaron estudios de percepción de riesgo, y es alto en lugares endémicos, pero bajo e inclusive desconocida la enfermedad, en lugares cercanos.
En tanto, los equipos de tecnología y comunicación, también aportan en la concreción de estrategias comunicativas para que la información llegue de forma clara, correcta, completa, concisa, coherente y creativa, entre otros atributos que debe cuidarse al comunicar y hacerlo de manera efectiva. “Debemos comunicar conociendo previamente la idiosincrasia socio cultural de la comunidad, si nuestro objetivo es instruir, además de informar”, dijo Fernández.
“Se debe lograr que el mensaje se difunda a la mayor cantidad de personas, pero en particular debe apuntarse a las poblaciones más vulnerables frente a esta enfermedad”
En este sentido aseguró que “el principal objetivo debe ser instalar el tema en la comunidad, solo así se alcanzará una percepción real de riesgo y la aplicación de las medidas de prevención instruidas en la comunidad en cuestión”.
Trabajo sostenido
Para finalizar, el docente-investigador de la UNNE reiteró la importancia de sostener las acciones para seguir revirtiendo la incidencia de la enfermedad, y destacó en esa línea la importancia de la tarea que los distintos actores vienen desarrollando.
«Dada las características socioeconómicas y culturales de la Hidatidosis, la percepción de riesgo inadecuada, puede inferirse que el camino a la solución del problema, es sin dudas, trabajar desde el concepto de UNA SALUD” concluyó.