
La World Diabetes Foundation destacó el programa desarrollado por la Facultad de Medicina que redujo la macrosomía del 9,6% al 7,2% en cuatro años. La doctora Silvia G. de Lapertosa coordinó esta iniciativa que ya implementó más de 34.000 pruebas diagnósticas en siete provincias argentinas y está cambiando la atención primaria de la salud materna.
En un artículo publicado recientemente, la World Diabetes Foundatios (WDF) reconoció a la Facultad de Medicina de la UNNE por su colaboración en la campaña internacional contra la diabetes gestacional.
Se destacó el trabajo de la doctora Silvia G. de Lapertosa coordinadora del Programa EDUGEST, una herramienta diseñada para abordar las deficiencias en la atención primaria relacionadas con el diagnóstico tardío y el tratamiento ineficaz de la diabetes gestacional.
La hiperglucemia en el embarazo (HIP) se ha convertido en un serio problema para los sistemas de salud. A nivel mundial, afecta a uno de cada cinco nacidos vivos, siendo América del Sur y Central particularmente los más vulnerable, con el 15,8% de las mujeres en edad reproductiva afectada por esta condición.
“La mayoría de los casos —entre el 75% y 90%— corresponden a diabetes mellitus gestacional, una resistencia a la insulina que se desarrolla durante el embarazo», explica el informe presentado por WDF y OPS (Organización Panamericana de la Salud) recientemente durante el seminario web «Hiperglucemia en el embarazo en América Latina».

EDUGEST no es solo otro programa de salud pública. Es una herramienta metodológica que identifica y ataca el problema de raíz: la detección tardía y el tratamiento ineficaz de la diabetes gestacional en la atención primaria.
El programa se despliega como una red de conocimiento que abarca desde Buenos Aires hasta Misiones, pasando por Corrientes, Chaco, Salta, San Juan y Neuquén, Mendoza, Catamarca. Su implementación en Centros de Atención Primaria (CAPs) y maternidades ha permitido realizar 34.492 Pruebas de Tolerancia Oral a la Glucosa, detectando 1.861 mujeres embarazadas con diabetes gestacional.
Los resultados del Programa presentados recientemente por la doctora Lapertosa en la OPS son los siguientes: la macrosomía —cuando el bebé nace con un peso superior a 4 kilos— se redujo del 9,6% en 2020 al 7,2% en 2024. Esta disminución es determinante, ya que la macrosomía aumenta significativamente los riesgos durante el parto tanto para la madre como para el bebé.
«Diría que empoderamos a las mujeres, pero también a los equipos de salud», reflexionó la doctora de Lapertosa. «Para estos equipos, ha significado aprendizaje, motivación, crecimiento, formación y la oportunidad de adquirir experiencia a través de este trabajo. Aprendimos que la educación diabetológica salva vidas».
La estrategia educativa de EDUGEST es multifacética: talleres presenciales, cursos en línea gamificados y actividades de extensión comunitaria para las mujeres embarazadas, combinados con programas estructurados como diplomaturas y cursos de certificación para equipos interdisciplinarios que incluyen enfermeras, nutricionistas, obstetras y educadores.
Cuando llegó la pandemia, EDUGEST ya estaba preparado. Los campus virtuales de la Facultad de Medicina de la UNNE , con contenido interactivo, foros y módulos gamificados, permitieron mantener la capacitación sin interrupciones. «Estas plataformas siguen activas hoy en día, capacitando a equipos y difundiendo conocimiento a nivel nacional», destaca el informe.
La innovación tecnológica no solo mantuvo el programa funcionando durante la crisis sanitaria, sino que amplió su alcance y redujo la brecha digital en comunidades que tradicionalmente tenían acceso limitado a este tipo de recursos.
Los datos post-intervención del Programa muestran una transformación integral: las mujeres participantes mejoraron sus hábitos alimentarios, experimentaron un menor aumento de peso gestacional y reportaron mayor bienestar emocional. Pero quizás el indicador más significativo es la reducción en las internaciones hospitalarias.
Antes de EDUGEST en los centros de salud donde se implementa el programa, todas las mujeres diagnosticadas con diabetes mellitus gestacional requerían una internación promedio de tres días. Hoy, solo se internan aquellas que presentan eclampsia o riesgo de parto pretérmino, liberando recursos hospitalarios y reduciendo la carga emocional y económica sobre las familias.
En un contexto donde el 90% de los casos de hiperglucemia en el embarazo se concentran en países de ingresos bajos y medios, la experiencia dada a conocer por la profesional de la Universidad Nacional del Nordeste ofrece un modelo replicable y escalable para toda la región.