El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas se encuentran trabajando en la creación de un producto de triple acción: una emulsión con ingredientes de origen natural que protegerá contra el sol, los mosquitos y que cuenta con propiedades antiinflamatorias. Radio UNNE dialogó con Marcos Grunhut, investigador del CONICET y director de Sistemas Organizados y Desarrollos Analíticos (SODA).
Junto con Verónica Lassalle, quien encabeza el equipo de Nanomateriales Híbridos Aplicados (NanoHiAp), lideran este proyecto que buscan atender a dos problemáticas consideradas de salud pública: afecciones cutáneas producidas por la exposición prolongada al sol y las enfermedades virales transmitidas por insectos.
En los últimos años crecieron los concesos sobre la importancia del protector solar como un elemento indispensable para el cuidado de la salud, en todas las edades y a lo largo de todo el año. Por otra parte, el aumento de la incidencia de patologías infecciosas producto de picaduras de mosquitos, como el dengue, pasaron a la categoría de epidemia en nuestro país.
Buscando dar respuesta al complejo escenario, investigadores e investigadoras del CONICET desarrollaron un producto de triple acción: filtro solar con efecto repelente para mosquitos y antiinflamatorio. Se trata del “Reprotector UV”, elaborado con ingredientes de origen natural y con efectos antioxidantes.
Estos dos equipos del Instituto de Química del Sur (INQUISUR), que dependen del CONICET y de la Universidad Nacional del Sur, se encuentran trabajando en el proyecto en su fase de ensayos de laboratorio mientras que avanzan en los aspectos regulatorios para obtener el visto bueno por parte de Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
“Hace un tiempo venimos trabajando en el desarrollo de distintas formulaciones para productos farmacéuticos y de cuidado personal. Hemos logrado una preparación que consta de componentes que aportan la capacidad de filtrar la radiación UV a partir del uso de filtros de químicos inorgánicos; y por otro con componentes como aceites esenciales que aportan repelencia de insectos, que tantos problemas nos traen últimamente”, contó Grunhut en diálogo con la 99.7.
En detalle, el investigador explicó que junto con sus colegas perfeccionaron un método in vitro para determinar el factor de protección solar para emulsiones con nanopartículas de óxido de zinc y dióxido de titanio. Este proceso cumple con los estándares internacionales más exigentes de protección solar para evaluar el desempeño de filtros inorgánicos ultravioletas de amplio espectro, considerados fundamentales para la prevención de patologías como el cáncer de piel.
perfeccionaron un método in vitro para determinar el factor de protección solar para emulsiones con nanopartículas de óxido de zinc y dióxido de titanio
“Estamos finalizando los primeros estudios que tienen que ver con repelencia de mosquitos. Además, la formulación aporta otros componentes que le dan la capacidad antinflamatoria y antioxidante, es decir que es una formulación multipropósito y multifuncional, toda incluida en un mismo sistema”, compartió con orgullo Grunhut y remarcó que se priorizaron ingredientes “verdes”, de origen natural, como ser aceites esenciales de plantas aromáticas.
Las evaluaciones de toxicidad también son una prioridad para los equipos del INQUISUR, ya que el objetivo es que este protector solar llegue a un amplio espectro de la población y pueda ser utilizado por personas de piel sensible, niños, niñas y en bebés. Además, su consistencia de emulsión evitaría el color blanquecino característicos de muchos protectores solares del mercado.
“Sabemos que estamos utilizando materiales confiables y en la proporción indicada por organismos internacionales. Todo el estudio fue hecho considerando componentes que sabemos que cumplen con las exigencias de la producción de cosmética natural en todo el mundo”, señaló Grunhut y destacó en conversaciones de Radio UNNE la diversidad de agentes que participaron para el desarrollo de esta innovación.
Financiamiento público/privado
Los equipos recibieron un subsidio del Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la provincia de Buenos Aires para su puesta en marcha y llevan adelante el proyecto en colaboración con la microempresa Peñenwen Cosmética Natural de la ciudad de Bahía Blanca, que estará a cargo de su producción y comercialización.
“Siempre es importante la financiación del Estado, pero también del sector privado. Cada engranaje hace funcionar la ciencia. Esto es posible por la articulación entre organismos públicos y empresas que les resulta interesante sumar este tipo de productos en su oferta, posibilitando su formulación. No puedo dejar de mencionar también a quienes se dedican a investigaciones más básicas que, aunque no sean tan difundidas, son sumamente importantes”, enumeró Grunhut.
Siempre es importante la financiación del Estado, pero también del sector privado
El director de SODA remarcó que se trata de un trabajo en equipo que próximamente será escalado para su producción, que se pretende que llegue a todo el territorio nacional: “Hoy tenemos grandes problemas en el sistema de salud pública relacionados con enfermedades transmitidas por mosquitos, y con la exposición solar excesiva. Además, se trata de una transferencia que aporta al desarrollo económico y crecimiento de empresas locales”.