Desde el Laboratorio de Química Analítica Instrumental, de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNNE, hicieron un balance de «altamente positivo» del proyecto «Cannabis Medicinal: un enfoque desde la evidencia científica», del programa UNNE Salud, Exactas, orientado a aportar, desde la ciencia, al cultivo, producción, comercialización y uso seguro del cannabis medicinal.
El uso del cannabis con fines medicinales ha cobrado auge en los últimos años.
En Argentina ese aprovechamiento se intensificó tras la sanción de leyes que fijaron marcos regulatorios para la investigación médica y científica del uso medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor de la planta de cannabis y sus derivados, así como para el desarrollo de la industria del cannabis medicinal y el cáñamo industrial.
En ese contexto, desde la Universidad Nacional del Nordeste, el Laboratorio de Química Analítica Instrumental (FaCENA-UNNE) fue pionero en la región en la experimentación con cannabis, con la premisa de generar conocimiento científico que respalde la utilización segura de los preparados que se realizan a partir de esta planta que tiene aplicaciones terapéuticas.
Pero además de la búsqueda de generar conocimiento científico de interés en la temática, el objetivo desde la UNNE fue siempre que el conocimiento generado «no quede en el laboratorio» sino que pueda ser transferido y aprovechado en la sociedad por pacientes que lo requieran.
Así surgió la idea de trabajar mediante proyectos de extensión universitaria en responder a la demanda de la sociedad de mayor información sobre el cannabis y sus usos medicinales.
Uno de los proyectos en esa línea fue «Cannabis Medicinal: un enfoque desde la evidencia científica», aprobado en la Convocatoria 2023 del Programa UNNE Salud Exactas, que tuvo a la Asociación Cannábica Correntina para Investigación Medicinal como organización co-participante.
La iniciativa se realizó entre los años 2023 y 2024, con el objetivo de vincular a distintos actores y sectores que vienen trabajando en torno al cannabis medicinal y su uso responsable, como empresas, asociaciones de cultivadores, organismos gubernamentales y grupos de pacientes.
En el marco del proyecto se hicieron charlas en las que se abordaron diversos temas relacionados con el Cannabis Medicinal, talleres de elaboración de aceite medicinal de cannabis, trabajos de análisis de cannabinoides en aceites medicinales donados para pacientes que requieran el producto con urgencia, y se participó en distintos eventos en los que se pudo exponer sobre el potencial de este cultivo con fines terapéuticos en pacientes que lo requieren.
Desde el Laboratorio de Química Analítica Instrumental, en diálogo con UNNE Medios, hicieron un balance de las actividades desarrolladas y destacaron que se logró llevar el mensaje claro de que «el cannabis cuenta con propiedades que pueden ser aprovechadas con fines medicinales, pero que esa utilización debe estar respaldada por la evidencia científica».
Balance Positivo.
«Evaluamos como altamente positivo el balance del proyecto de extensión por medio del cual pudimos acercar información con rigor científico a los distintos eslabones de la cadena del cannabis en la región nordeste, además de lograr vincularnos con iniciativas similares de otras partes del país» destacó el Dr. Mario Raúl Delfino, director del proyecto.
Indicó que en los últimos tiempos se han logrado importantes avances en la demostración de las propiedades medicinales del cannabis, no obstante, aún persiste en una parte de la sociedad la idea errónea de que el cannabis sólo es un estupefaciente peligroso, sin considerar sus propiedades benéficas aprovechables, así como también se mantiene el concepto inapropiado de que el cannabis sirve para todo.
Sobre ello, sostuvo que «la premisa de nuestro trabajo fue concientizar respecto a que el cannabis es algo complementario, no suplementario, de otros tratamientos convencionales, y que su consumo siempre debe contar con supervisión profesional, y con la utilización de productos elaborados de forma segura».
Detalle de Actividades.
Durante el periodo en que se ejecutó el proyecto «Cannabis Medicinal: un enfoque desde la evidencia científica» se realizaron 2 ciclos de charlas, en 2023 y 2024 respectivamente, en los que se abordaron diversos temas relacionados con el cannabis medicinal en vinculación con la Asociación Cannábica Correntina para Investigación Medicinal.
En dichas charlas se trataron temas como manejo de cultivo hogareño de cannabis; aspectos legales y obtención de REPROCANN (Registro del Programa Nacional de Cannabis Medicinal); elaboración de aceite medicinal de cannabis; toxicología del cannabis y sistema endocannabinoide; y buenas prácticas de elaboración y control microbiológico.
Se organizó además un conversatorio entre profesionales de la salud, con la participación de distintos profesionales de la salud (médicos, kinesiólogos, odontólogos, etc.) nucleados por la Asociación Cannábica Correntina para Investigación Medicinal.
También se realizaron talleres de elaboración de aceite medicinal de cannabis, en colaboración con la empresa Brest y Brest, se dictó un taller práctico de elaboración de aceite de cannabis medicinal, con destacada participación.
En la misma línea, se recibieron muestras de la asociación civil «Misiones Activa» para la determinación de cannabinoides en muestras vegetales con fines medicinales.
Como estrategia de difusión del proyecto, se participó en distintos eventos científicos y culturales de la región, como la Feria Provincial del Libro de Corrientes, con participación en las últimas tres ediciones (2022-2023 y 2024), logrando que edición tras edición haya un espacio diario vinculado al cannabis y su uso medicinal e industrial.
En tanto, como fruto de la vinculación lograda, la UNNE, a través de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura, en conjunto con asociaciones civiles de cannabis llevó adelante las «Primeras Jornadas Regionales de Cannabis Medicinal, Autocultivo e Industria del Cáñamo», reuniendo a empresas, cooperativas y asociaciones civiles del NEA.
Perspectivas.
«Creemos que este proyecto consolidó las bases necesarias para que la Universidad siga acompañando un aprovechamiento seguro del cannabis medicinal apoyado en la evidencia científica» reiteró el responsable del Laboratorio de Química Analítica Instrumental (FaCENA-UNNE).
Al respecto, destacó el interés demostrado por los distintos sectores que trabajan en cannabis en respaldar lo que vienen haciendo con las evidencias existentes sobre la eficacia y seguridad de esta herramienta terapéutica, así como por la formación específica en la temática.
Comentó que el proyecto de extensión favoreció el surgimiento de nuevos desafíos de abordaje en los que ya se está trabajando.
Entre esos desafíos, se menciona la necesidad de ofertas formativas que permitan atender las nuevas regulaciones y requisitos del Ministerio de Salud de la Nación para la gestión de los permisos REPROCAM, que establece que los médicos que prescriban cannabis medicinal estén capacitados con diplomaturas o maestrías.
Actualmente, desde la UNNE se avanza en el diseño de una diplomatura que podría dictarse en modalidad «interuniversitaria» con otras universidades que están trabajando en la misma línea, así como en colaboración con empresas y asociaciones.
También se está trabajando en ampliar la cantidad de ensayos a realizar para ofrecer a cultivadores para que puedan hacer controles de sus materiales biológicos y productos en la universidad.
En un trabajo conjunto con la empresa Caá Cannabis, de gestión estatal de la Provincia de Corrientes, se está planificando la realización de ensayos de estabilidad, con el fin de monitorear la estabilidad del producto en el envase.
«Seguiremos trabajando desde un enfoque multidisciplinar y desde la evidencia científica, y revalorizando la importancia del vínculo entre médico y paciente en la utilización segura de productos medicinales con base en cannabis» concluyó el Dr. Delfino.