Estudiantes de la Facultad de Ingeniería de la UNNE entregaron a la institución un equipo diseñado y construido por ellos, para actividades didácticas, denominado técnicamente como “mesa vibradora de 1 grado de libertad”. Luis Ramón Falcón y Mercedes Ute Rothe, que cursan la carrera Ingeniería Civil, recibieron el reconocimiento de las autoridades por la iniciativa que promueve la formación de los futuros ingenieros y además fomenta y estimula la creatividad para sumar a más investigadores y diseñadores tecnológicos en la casa de estudios, afirmaron.
El Decano de la Facultad, Mario Eduardo De Bortoli, acompañado por la Secretaria Académica, Lilia Báez, recibieron la mesa vibradora diseñada por Falcón y Rothe, quienes realizaron pruebas de su funcionamiento ante las autoridades al tiempo que agradecieron el apoyo brindado para concretar el proyecto a través de la Asociación de Apoyo de la Facultad de Ingeniería, AFIN.
Características del dispositivo
La “mesa vibradora de 1 grado de libertad”, tal como se la denomina técnicamente, será destinada a tareas didácticas en las cátedras Hormigón Armado II, Mecánica Racional de Ingeniería Civil y también en Dinámica Estructural, materia del Posgrado Maestría en Ciencias de la Ingeniería, explicó la profesora Claudia Morel.
Morel, en su carácter de Jefa de Trabajos Prácticos de Hormigón Armado II, precisó que los alumnos Falcón y Rothe diseñaron y construyeron una mesa vibradora de 1 grado de libertad que consiste en una mesa que se desplaza en un solo sentido de los ejes coordenados, movimiento que permite generar distintas frecuencias para ensayar modelos estructurales y demostrar fácilmente conceptos básicos de dinámica estructural a los estudiantes, ya que, por su portabilidad, es fácil de transportar y configurar en un entorno de laboratorio o en el aula.
Una de las características básicas de cualquier estructura dinámica es su frecuencia resonante (o natural), dijo Morel y agregó que está la frecuencia a la cual los objetos son propensos a vibrar con mayor intensidad en ausencia de cualquier fuerza externa. Los edificios vibran de manera similar reaccionando a los fuertes vientos y terremotos.
“La frecuencia natural del edificio depende de su rigidez y de su masa y el efecto que tiene la masa en la frecuencia es muy fácil de demostrar a través de un ensayo sencillo, utilizando un péndulo invertido con una masa concentrada en su extremo” afirmó.
Programación y calibración
Mercedes Ute Rothe, estudiante de la carrera Ingeniería Civil explicó que su función en el proyecto fue la parte de programación. “Usamos una plataforma electrónica con una base Arduino, que funciona como una biblioteca y en ese contexto se toma lo necesario para el proyecto, específicamente para el control de los motores paso a paso para luego proceder a calibrar e introducir los parámetros y variables con las que trabajamos”.
Rothe indicó que en el marco del proyecto van por perfeccionar el equipo, con detalles de calibración. “Es una tarea en la que estamos ahora y como siempre invitamos a todos aquellos alumnos que tengan iniciativas similares de investigación y diseño a sumarse para ampliar las perspectivas respecto a la configuración de propuestas vinculadas con el aprendizaje de la ingeniería”, remarcó.
Detalles del modelo
En cuanto a la construcción del equipo, parte que le tocó a Luis Falcón, éste precisó, de manera sintética, que la “mesa vibradora” está compuesta por una tarjeta electrónica Arduino de código abierto, para controlar el motor con las calibraciones adecuadas, ajustando los valores de acuerdo con las necesidades. Consta de una plataforma de policarbonato, ejes, rulemanes lineales, motores paso a paso, la tarjeta de la interfase que va arriba del arduino, con el chip controlador del motor A4988.
Falcón destacó el apoyo de los directivos de la Facultad, específicamente de la profesora Claudia Morel quien siguió el proyecto desde sus comienzos, y en el mismo sentido a la actual Secretaria Académica, Lilia Báez, , “lo cual nos entusiasmó para seguir adelante, más aún cuando nos apoyaron financiando la compra de materiales”.
En cuanto a los agradecimientos, Falcón y Rothe los hicieron extensivos al Decano De Bortoli, a AFIN, al equipo de Hormigón de la Facultad y “a todos los que siempre nos impulsaron a finalizar el proyecto y siguieron nuestro trabajo paso a paso”, concluyeron.