Un libro recopila el conocimiento de más de cinco décadas sobre bosques del Chaco Húmedo

Se publicó una guía ilustrada con más de un centenar de especies vinculadas a los bosques de quebrachales de la región del Chaco Húmedo. El libro, publicado desde el Laboratorio de Ecología Vegetal de FaCENA-UNNE, concentra la tarea científica de más de cincuenta años en esta zona de gran biodiversidad, pero fuertemente afectada por la acción antrópica.

 

“Plantas del Quebrachal. Plantas del bosque mesófilo del distrito oriental húmedo de la Provincia Fitogeográfica Chaqueña” se denomina la guía ilustrada publicada por el Laboratorio de Ecología Vegetal de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE (FaCENA-UNNE).

Cuenta con dibujos científicos de 107 especies de árboles, arbustos, trepadoras, hierbas, epífitos y hemiparásitos que crecen en los quebrachales del noreste correntino, este chaqueño, este formoseño y noreste santafesino.

Cada especie ilustrada reúne información sobre la nomenclatura científica, nombres vulgares, una descripción somera de la planta, el hábitat, la bioforma, dispersión de sus diásporas, utilidades, distribución, fenología y estado de conservación. Las ilustraciones cuentan con una breve lista de la bibliografía específica para cada especie.

“La guía es el resultado de muchos años de trabajos de un equipo de botánicos, técnicos y colaboradores, iniciado en la década de 1970 por el ecólogo Dr. Ulrich G. Eskuche”, según se destaca en la publicación que estuvo a cargo del Dr. José Luis Fontana, director del Laboratorio de Ecología Vegetal (FaCENA-UNNE) y que contó con ilustraciones de Francisco Rojas y Graciela Zanutti.

Así, la publicación sobre las distintas especies del Chaco Húmedo refleja décadas de observaciones directas, relevamientos, colectas, dibujos sobre material fresco y material seco, identificaciones hechas por especialistas, que permitieron recoger una valiosa información que se da a conocer en este material impreso.

“La guía también busca aportar al abordaje actual de la región de los quebrachales, considerada un área natural de gran vulnerabilidad debido a la acción antrópica que pone en peligro su conservación” señala el Dr. Fontana respecto al trabajo realizado.

En ese aspecto, indica que desde que comenzaron los trabajos científicos en esta región, hace medio siglo, muchas hectáreas del bosque desaparecieron, y con esa reducción, disminuyeron las poblaciones de muchas especies ligadas a los quebrachales, especies que se volvieron vulnerables según la categorización de la IUCN.

Actualmente se realizan experiencias de restauración de bosques en el Chaco Húmedo, enriqueciendo los bosques degradados y recuperando áreas donde antes existió, utilizando con ese fin muchas de las especies que se describen en la guía.

Por ello, el Dr. Fontana reiteró la importancia de poder aportar desde la ciencia en la protección de esta región que ocupa gran parte del norte argentino.

 

LA REGIÓN CHACO HÚMEDA

La región de Chaco ocupa una superficie de 1.141.000 km2, de los cuales el 59% está en la Argentina, es decir aproximadamente 675.000 km2.

Es la región biogeográfica más extensa de América del Sur, después de la Selva Amazónica.

Abarca una gran diversidad de climas, y reúne una enorme diversidad de paisajes y ecosistemas, constituidos por una alta diversidad específica. Para el gran Chaco se citan unas 3400 especies de plantas, de las cuales 400 son endémicas.

Dentro de la región Chaco, se encuentra la zona húmeda conocida como “Distrito Oriental” o “Chaco Húmedo”, caracterizadas por los bosques con quebracho colorado.

El Chaco Oriental abarca en Argentina más de 120.000 km2, superficie que según distintos autores puede alcanzar 200.000 km2. Ocupa aproximadamente la mitad este de las provincias de Chaco y Formosa y parte del norte de Santa Fe y noreste de Corrientes, según se describe en la publicación.

La vegetación típica está constituida por un mosaico de formaciones en el que las isletas y los remanentes del bosque de quebracho colorado se alternan con los palmares de Caranday y humedales en los que las comunidades acuáticas y pajonales caracterizan el paisaje.

La distribución de estas unidades en el Chaco Húmedo depende fundamentalmente de la topografía del terreno, así como de gradientes de salinidad y humedad del suelo.

De este modo los quebrachales se desarrollan en zonas más altas, libres de inundaciones, los palmares de caranday en las depresiones y en las zonas más bajas, sujetas a inundaciones durante gran parte del año se encuentran los humedales.

En sitios con suelos pesados, así denominados por la mayor proporción de partículas finas (limo y arcilla) aparece el quebracho colorado, una especie emblemática ya que representa a la región chaqueña, a la que se encuentra íntima y exclusivamente asociada.

Da origen a los quebrachales, un bosque mesófilo denso en el Chaco Húmedo donde se extiende en una franja al noroeste del río Paraná, por Formosa, Chaco y Santa Fe, y en el noroeste de Corrientes.

En la provincia de Corrientes forma quebrachales abiertos, resultado de la degradación por antiguas explotaciones, en el área comprendida entre el río Paraná al oeste y al norte, hasta Scorza Cué, y una línea que une esta última localidad con Mburucuyá al sur y Saladas en el oeste.

En la provincia del Chaco los bosques con quebracho se extienden por el borde del valle inundable hasta el norte de la provincia de Santa Fe (se encuentran hasta Gobernador Crespo, al sur de la localidad de Calchaquí) y por Formosa, continuándose en Paraguay.