La Universidad Nacional del Nordeste completó el tercer proceso de autoevaluación, que le permitió identificar fortalezas y debilidades en el desarrollo de sus funciones, sobre los que continuará trabajando a fin de seguir mejorando su calidad institucional. El análisis sobre el período 2009-2019 se desarrolló de forma abierta y contó con la comprometida participación de la comunidad universitaria. Los resultados estarán disponibles en un sitio web, por medio del cual se podrá seguir dejando propuestas de mejoras. La siguiente etapa es la evaluación externa de la CONEAU.
A pesar de los obstáculos de la pandemia por Coronavirus, se culminó el trabajo del que participaron activamente autoridades, docentes, no docentes, estudiantes y graduados de la UNNE. Desde esta construcción colectiva, se avanzó con un abordaje metodológico integral y comprensivo para un completo análisis institucional de todas las funcione, que incluyó una mirada crítica de sus logros y dificultades para detectar problemáticas prioritarias y elaborar propuestas de mejoramiento.
“La evaluación institucional supone para la comunidad de la UNNE, la oportunidad de llevar adelante un análisis crítico de las funciones sociales que cumple en su devenir cotidiano”, resaltó la rectora, María Delfina Veiravé, sobre este proceso en el que se evaluaron las funciones sustantivas de la educación superior: docencia, investigación y extensión; así como la gestión, transferencia, internacionalización y el vínculo con la sociedad, entre otras también de singular importancia.
En el prólogo del informe final, la Rectora Veiravé señaló además que la Universidad Nacional del Nordeste, en tanto institución pública, “es consciente de la necesidad de asegurar la calidad de los procesos y los resultados de su actividad, así como de la importancia de exponer con transparencia sus debilidades, problemas y limitaciones para lograr sus objetivos”.
“En ese camino, este proceso de autoevaluación nos permite acceder a comprensiones más profundas y sistemáticas, sobre los modos en que la Universidad construye colectivamente y en diálogo con la sociedad, su función social tanto en términos de calidad, de ética, de equidad y de pluralidad democrática”, remarcó.
Planificar y evaluar, un modelo de gestión
Además de ser una de las universidades pioneras en evaluación institucional, la UNNE sostiene, hace más de tres décadas, una cultura de la evaluación permanente y ligada a la planificación institucional.
En 1993 se realizó el primer proceso interno mediante el Programa Integral de Autoevaluación, que se consolidó al año siguiente como Programa Central de la Universidad, a partir de la creación del Sistema de Evaluación Permanente.
Además, la universidad cuenta con su segundo Plan Estratégico de Desarrollo Institucional (PEDI) aprobado. El primero abarcó el periodo 2012-2020 y el vigente corresponde al 2020-2030. Ambos son documentos dinámicos, producto de un proceso contínuo, construido desde la participación y el consenso para coordinar las acciones que permitan el logro de su misión.
El proceso
Una evaluación institucional es un proceso que busca mejorar la calidad de la universidad. Se analizan logros y dificultades en el desarrollo de las funciones y de allí surgen medidas de mejoramiento. Dispuesto por la Ley de Educación Superior Nº 24.251, el proceso consta de dos instancias: una interna denominada “Autoevaluación Institucional” y una externa realizada por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria.
La UNNE instrumentó este tercer proceso interno a través de la Resolución N° 885/17 aprobada por el Consejo Superior (C.S.), como paso previo a solicitar a la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU) la tercera evaluación externa en la historia de UNNE. En esta ocasión, la mirada interna se desarrolló sobre el periodo 2009-2019.
El trabajo se llevó adelante bajo la coordinación de la Secretaría General de Planeamiento y a través del Sistema de Evaluación Permanente de la UNNE. Se constituyó para ello un equipo técnico central con personal de distintas áreas de la Universidad, y se renovó la Comisión Central de Evaluación, constituida por las y los representantes de todas las unidades académicas.
“Los resultados del trabajo realizado son destacables en términos del volumen de información sistematizada y de la exhaustividad del análisis, dando cuenta de la experiencia desarrollada por la Universidad en este tercer proceso. Por otra parte, son producto de diversas instancias de trabajo institucional que dan continuidad histórica a la concepción participativa con la que la UNNE desarrolla todos sus procesos de planificación y evaluación institucional”, señaló la Secretaria Gral. de Planeamiento, Cra. Esp. Mabel G. Yanda.
Se avanzó primero con las etapas de relevamiento de información, análisis y discusión de la información, sensibilización y socialización, y redacción del informe propiamente dicho.
Sin embargo, el cronograma previsto se vió afectado por las medidas derivadas del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) a causa de la pandemia por Covid-19. Si bien las principales acciones no se vieron interrumpidas, si debieron modificarse algunos plazos fijados y modos de llevar adelante algunas tareas tales como reuniones, jornadas de socialización, búsqueda de información y organización de las formas de trabajo, entre otras. En este escenario, se realizó la recolección de datos cuantitativos y cualitativos.
“Incluso con ese contexto complejo y de gran incertidumbre, es destacable el compromiso de las y los actores de la Universidad, que aportaron con conciencia, responsabilidad y conocimiento de la importancia y utilidad del proceso, que servirá para la toma de decisiones y para el mejoramiento y fortalecimiento institucional”, destacaron desde el Equipo Técnico Central.
Un proceso abierto y participativo
Uno de los principios básicos de la autoevaluación es que sea participativa. Para ello, y a fin de fortalecer también el sentido de pertenencia y el compromiso de la comunidad universitaria, desde 2019 se concretaron diversas acciones orientadas a que estudiantes, docentes y no docentes estén informados e involucrados en el proceso. Se desarrollaron encuentros informativos en los tres campus de la Universidad, en Chaco y Corrientes; y se diseñaron estrategias de comunicación que fueron implementadas a través de los diferentes medios que posee la UNNE: redes sociales, página web, medios digitales, radiales, etc.
A la vez, para promover aún más la participación y la expresión de la pluralidad de participantes de la Universidad, se implementaron encuestas en línea, realizadas a través de los canales institucionales y a cargo de un equipo profesional especializado.
Por medio de las mismas, se buscó relevar opiniones, propuestas y percepciones sobre la calidad institucional de la Universidad y, de este modo evaluar las acciones desarrolladas en los últimos años por la institución en las funciones de docencia, investigación y transferencia, extensión y vinculación, en los servicios, las bibliotecas y la infraestructura, así como en la organización, el gobierno y la gestión institucional.
Se realizaron unas 1.080 encuestas a docentes, 2.436 a estudiantes y 343 destinadas al personal no docente; duplicando en número a las realizadas en el proceso de la segunda autoevaluación institucional.
“Es la tercera vez que participo de un proceso de evaluación. También tuve la suerte de participar de las anteriores evaluaciones, y celebro que la UNNE mantenga este tipo de prácticas que tanto aportan y benefician a la institución, porque permite escuchar todas las voces y así identificar mejor los logros y principalmente los aspectos donde aún hay que seguir trabajando”, señaló una integrante de la Comisión Central de Evaluación.
“Es muy importante que existan estas instancias para poder conocer cómo estamos y cuáles son los puntos críticos que debemos mejorar o en los cuales hay que realizar un mayor esfuerzo”, agregó en tanto otro referente.
De este modo, la UNNE cumplimentó una vez más con este proceso de revisión interna, que resulta estratégico para el desarrollo y el mejoramiento de las funciones de la Universidad. No obstante, por medio del micrositio próximo a lanzarse, se continuará recibiendo aportes de la comunidad universitaria; mientras se avanza hacia la evaluación externa por parte de la CONEAU.