INESTIGADORES DE UNNE
Identifican el fósil más antiguo de un reconocido grupo de “armadillos” 

Ilustración Pedro Cuaranta

Un estudio con participación de especialistas de la UNNE, Conicet y de otros centros de investigación de Argentina y de Colombia, identificó el fósil más antiguo del conocido grupo de armadillos “Dasypodini”. El estudio aporta a la historia evolutiva de ese grupo de armadillos y confirma que su origen está en el norte de Sudamérica.

 

Los “armadillos”, grupo de mamíferos placentarios que se caracterizan por poseer un caparazón dorsal formado por placas óseas, tienen relevancia en estudios paleontológicos por su amplia distribución así como por la información que aportan debido a su mejor estado de conservación respecto a otros fósiles.

Dentro de los armadillos, hay dos grandes grupos que son los Dasypodidae y los Chlamyphoridae. Del primer gran grupo, Dasypodidae, los Dasypodini son los únicos que llegan hasta la actualidad, representados por las especies del género Dasypus, comúnmente conocidas en Argentina como «mulita», «tatú negro» o armadillos de nueve y siete bandas.

Además, los Dasypodini revisten importancia porque son los únicos armadillos que cruzaron a América del Norte en el gran intercambio biótico americano, en donde se encuentran ampliamente distribuidos actualmente, y que tienen sus registros más antiguos en ámbitos intertropicales (Colombia y Ecuador).

En ese contexto, investigadores del Centro de Ecología Aplicada del Litoral (CECOAL), dependiente de la UNNE y CONICET, en colaboración con especialistas de Argentina y Colombia, llevaron a cabo un estudio que ofrece nuevas pistas sobre la historia evolutiva de este grupo de armadillos.

En la investigación se estudiaron restos fósiles de un ejemplar hallado en el año 1985 por el Dr. Carlos Villarroel, de la Universidad Nacional de Colombia, durante una serie de trabajos de campo en los depósitos del Mioceno medio de la Formación La Victoria (Área de La Venta, en Huila, Colombia). Los restos permanecieron durante años en la colección de esa universidad, hasta que finalmente captaron la atención de los especialistas Mgtr. Daniel Barasoain y el Dr. Alfredo Eduardo Zurita, investigadores del CECOAL, momento en el que comenzó a gestarse un trabajo colaborativo internacional.

 

“El fósil descrito representa el registro más antiguo de este grupo de armadillos, datado en más de 13 Ma (millones de años antes del presente). Además, la información generada profundiza el conocimientos sobre los Dasypodini, permitiendo confirmar un origen tropical para este singular linaje” explicaron el Mgtr. Barasoain y el Dr. Zurita.

Los resultados del estudio fueron publicados en la revista “Historical Biology. An International Journal of Paleobiology”, que publica artículos sobre desarrollos en las ciencias relacionados con la historia de la vida a través del tiempo geológico y la biología de organismos pasados.

DETALLES DEL ESTUDIO

En cuanto a los aspectos técnicos del trabajo, indicaron que el material estudiado incluye la parte anterior de cráneo y un fragmento articulado del caparazón dorsal, compuesto por la última fila de osteodermos móviles más una fila de osteodermos semimóviles y dos filas de osteodermos fijos del escudo pélvico, ambos pertenecientes a un solo individuo.

El cráneo del ejemplar estudiado no sólo representa el cráneo más antiguo sino también el más completo de un Dasypodini del Mioceno.

Del análisis de los restos, los investigadores concluyeron en que se reporta y describe un nuevo género y especie de Dasypodidae Dasypodini (Plesiodasypus colombianus gen. nov. sp. nov.) del Mioceno medio.

Según detallaron, a pesar de que la caracterización general del ejemplar apoya su inclusión en el grupo “Dasypodini”, la coraza dorsal muestra una combinación única de los clados principales de armadillos, Dasypodidae y Chlamyphoridae, permitiendo realizar inferencias sobre los procesos morfológicos transicionales que tomaron lugar entre ambos grupos.

Por otra parte, desde un punto de vista paleobiogeográfico, se refuerza la idea de un origen tropical de los Dasypodini.

“Los resultados del estudio están en concordancia con hipótesis previas que infieren el origen de este grupo de armadillos en latitudes tropicales” indicaron.

Además, los investigadores resaltan que la historia evolutiva y la paleobiogeografía de Dasypodini muestran un notable paralelismo con la historia evolutiva de los Glyptodontinae o gliptodontes (armadillos gigantes), otro grupo de cingulados con un posible origen tropical, a pesar de que ambos representan diferentes linajes con características ecológicas y morfológicas evidentes.

“Este hallazgo aumenta significativamente el conocimiento sobre la historia evolutiva y morfológica de estos grupos principales de armadillos, además de ayudarnos a entender las dinámicas a través del tiempo de aquellos grupos de xenarthros con un origen en los trópicos” resaltaron Barasoain y Zurita en relación al estudio desarrollado.

RELEVANCIA DE COOPERACION INTERNACIONAL

Los investigadores destacaron la importancia de participar en este tipo de proyectos científicos en colaboración nacional e internacional, que pone en relevancia la conformación de equipos especializados en la UNNE y CECOAL, cuyos trabajos se posicionan como referencia disciplinar.

El Dr. Zurita y el Mgtr. Barasoain integran el Laboratorio de Evolución de Vertebrados y Ambientes Cenozoicos del Centro de Ecología Aplicada del Litoral (UNNE-CONICET) y de las Cátedras de Paleontología y Paleontología de Vertebrados de la Facultad de Ciencias Exactas, Naturales y Agrimensura de la UNNE (FaCENA-UNNE).

En el estudio participaron además el Dr. Laureano González-Ruiz, especialista en cingulados fósiles, que pertenece al Laboratorio de Investigaciones en Evolución y Biodiversidad (LIEB-FCNyCS sede Esquel, UNPSJB) y del Centro de Investigaciones Esquel de Montaña y Estepa Patagónica (CIEMEP), dependiente de CONICET y la Universidad Nacional de La Patagonia San Juan Bosco; y el Dr. Carlos Villarroel del Departamento de Geociencias de la Universidad Nacional de Colombia.