Entrevista exclusiva con Radio UNNE
Martín Becerra: “Esta pandemia incrementó de manera inédita la necesidad social de información, lo que no se traduce en mayor credibilidad para los medios”

La transformación del sistema de medios y el cambio de hábitos de los públicos consumidores; la crisis mundial que atraviesan los medios de comunicación; cómo sobrevivir a la metamorfosis de medios y sobre la formación de los profesionales de la comunicación de hoy en día. Todos estos temas analizados por el calificado investigador y especialista en medios de comunicación e industrias culturales.

El renombrado periodista, escritor y docente universitario, poseedor de sobradas titulaciones en el área de la Información y la Comunicación, tomó contacto con RadioUNNE 99.7, oportunidad en la que se explayó sobre distintos temas de actualidad vinculados a su especialidad, brindando a la audiencia pinceladas políticas, mediáticas y de realidad universitaria de sobrado valor que sirven para comprender la realidad local y global en el sistema de medios.

Consultado sobre las transformaciones que viven en este último tiempo los medios de comunicación, el doctor en Ciencias de la Información Martín Becerra, aseguró que “el sistema de medios está muy complicado en todo el mundo porque atraviesa una transformación propia de cambio de hábitos de las sociedades para informarse y entretenerse, ambas, funciones que cumplen históricamente los medios”.

Explicó a su vez que en la actualidad, las sociedades van migrando hacia medios digitales, los que poseen todo un circuito de producción y circulación de contenidos que cambió mucho los códigos y las características que durante décadas y décadas había construido y consolidado el sistema de medios tradicionales”.

Sector en crisis con más de 5 mil despidos

Al hablar de los medios nacionales, el especialista hizo hincapié en dos realidades que profundizan la situación crítica del régimen legal y la regulación del sistema de medios “Argentina hoy es una suerte de Frankenstein –satirizó- es decir, tiene un cuerpo que deriva de las leyes que votó el Congreso en el año 2009 –hablo de las leyes de servicio de comunicación audiovisual- que fue diezmada y desarticulada en sus artículos centrales, a pesar de que una parte no menor continúa vigente, sin embargo, el corazón y una parte importante de su articulado fue desarmada por decreto del gobierno de Mauricio Macri” enfatizó.

“Este es el marco jurídico heredado -subrayó Becerra-, a ésto debemos sumar que en Argentina vivimos (los medios) una situación económica que ya no es fruto de la digitalización, sino de una macroeconomía muy recesiva que nos viene golpeando hace 5/6 años; y son las redacciones y los medios de comunicación de red local más pequeños, los que más lo vienen sufriendo”.

Sobre esto último, el experto mencionó el saldo lamentable de más de 5 mil puestos de trabajo perdidos por despidos en todo el país. “Son muchas las empresas periodísticas de las más diversas tendencias editoriales las que sufren ésta realidad; de hecho, han cerrado medios como la Agencia DyN -cuyos accionistas mayoritarios eran Clarín y La Nación- como así también el diario La Razón, propiedad del grupo Clarín; a la par, hay medios que no han cerrado, pero que están al borde de hacerlo”, expuso.

“El contexto es muy negativo para las empresas de
medios de todo el mundo”

A la pregunta de cómo sobrevivir a esta metamorfosis en curso vinculada a los cambios de hábitos en la comunicación, el entretenimiento y la información, el investigador de medios dijo al aire de Radio Universidad Nacional del Nordeste “quién tenga la respuesta a esta pregunta, podrá obviamente, ganarle a todos en esta competencia por la atención limitada del público… lo cierto es, que el contexto es muy negativo para las empresas de todo el mundo, no solamente para las de nuestro país”.

Dió ejemplos de algunas empresas que han logrado posicionarse bien pese a todo “pero creo que sus logros no son “importables” a América Latina; un claro ejemplo son los muros de pago del New York Times o el Wall Street Journal que son marcas globales con públicos planetarios que tienen una calidad, una plantilla de periodistas y de columnistas colaboradores, que aportan un contenido realmente original en cada segmento del día”, destacó.

Sobre ésta práctica que funciona en éstos grandes medios americanos, Becerra explicó que son muy pocos los que pueden hacerlo en términos económicos “porque lo que explotan estas empresas es lo que en economía llamamos “economía con efectos de red”, es decir, van aprendiendo qué hacer cada minuto que pasa, aprendiendo a su vez de su posición de liderazgo y absorbiendo datos de esa experiencia global de audiencias; aprendizajes y seguimientos que obviamente, en Argentina -e incluso en Brasil y México- son imposibles de hacer”.

Con referencia a los “muros de pago” dijo que si bien hay algunos medios que copiaron esa receta para acceder a sus contenidos “les va mal, porque no tienen contenidos originales, por lo tanto, lo que uno consulta en el portal A, lo encuentra gratis en el portal B con el mismo contenido, mismo enfoque editorial y tratamiento” sentenció.

“Un trabajo precarizado no puede dar como
resultado, un producto de calidad”

“Los criterios de calidad en la historia del periodismo han evolucionado con el tiempo”, sostiene el destacado investigador del CONICET. “Hoy en día existen dos tipos de planteos para ésta cuestión. Uno tiene que ver con el proceso de pensar la calidad, donde el trabajo de proceso periodístico está muy limitado, debido a que hay que resolver -en el mismo tiempo que tenías para escribir una noticia- cómo hacer para escribir 4 o 5 notas”.

En éste punto, Becerra mencionó nuevamente los despidos en el último tiempo, los que sin duda hicieron mella en la precariedad y la degradación de la calidad del trabajo. “Un trabajo precarizado no puede dar como resultado, un producto de calidad”, subrayó enfático.

“La otra cuestión –dijo- tiene que ver con el criterio de calidad ligado a la velocidad y la inmediatez; un reportero gráfico hoy en día, sube imágenes en los portales sin importarle demasiado la parte estética de la fotografía, sino más bien la inmediatez y la primicia. Y esto también es válido para el formato escrito, donde vemos muchas notas en los principales portales que no tienen coherencia lógica –enfatiza ofuscado- con errores ortográficos y duplicación de párrafos…”

“En síntesis: la diversidad y el chequeo de fuentes sigue siendo un principio inalterable para lograr calidad en el producto periodístico. Hay más calidad en el producto periodístico en la medida que los periodistas consultan más fuentes y chequean que esas fuentes sean dignas de crédito. Esto es lo que habitualmente no vemos en la rutina diaria de los medios, ni siquiera de aquellas empresas que tienen el sartén por el mango”.
Consumo vs. credibilidad en los medios en tiempos de pandemia

El doctor Becerra se refirió en otro párrafo de la entrevista, a la necesidad social de información que se evidenció en éste tiempo de emergencia sanitaria. Basado en encuestas de todo tipo para argumentar su posición, el especialista en medios de comunicación remarcó “esta pandemia incrementó de manera inédita la necesidad social de información, lo que no se traduce en mayor credibilidad para los medios”, remarcó. Sucede además que la sociedad argentina -cuando le preguntan sobre el tratamiento de la pandemia y tema salud en los medios- refiere que son muy alarmistas y sensacionalistas y que sólo creen determinadas publicaciones de los medios oficiales y no en un continuo general”.
«Ante esta doble percepción social, el comportamiento de la audiencia se volvió ambiguo:

Descreemos de los medios o no le tenemos mucha confianza, y a la vez, estamos atrapados por sus noticias»…

 

… un comportamiento contradictorio, porque necesitamos tener información y parte de nuestros consumos culturales tienen que ver con el morbo, es decir, hay muchos factores que determinan esta supuesta contradicción. Pero no hay necesariamente hoy credibilidad en el sistema de medios”, expresó.


El valor en la formación profesional de un comunicador

Ya en el cierre del nutrido intercambio, el doctor Martín Becerra respondió a la pregunta de cuál es su visión sobre los contenidos que no deben faltar en la formación de los futuros profesionales de la comunicación. El especialista argumentó desde su lugar de docente universitario y dijo “en mi opinión, la gran diferencia entre los egresados de las carreras técnicas de Comunicación y aquellos que se formaron en la Universidad se puede ver en el desempeño profesional de éstos últimos, por el tipo de formación básica que la universidad –como institución- y la vida universitaria les da”.

Para explicar esto, recordó la lógica ansiedad que comúnmente advierte en los estudiantes por tener habilidades instrumentales inmediatas “y esto es como con las tecnologías con las que trabajamos en las redacciones, las instituciones públicas y privadas o las ONG’s, son nuevas destrezas técnicas que se adquieren con buenos tutoriales o cursos de actualización; en cambio, el contexto sociohistórico, la formación teórica en la producción, la circulación de discursos sociales o la economía política de un sector, son cuestiones de base que no se adquieren con un mero tutorial…

… es por eso que para mí, la comprensión de cómo funcionan los medios, de las necesidades sociales y de las organizaciones particulares, son cuestiones que hacen diferencia en la formación universitaria de los comunicadores”.

“Un claro ejemplo es el tema “violencia de género” donde hay cuestiones que tienen que ver con la sociología, la antropología y la psicología. Entonces, aquel comunicador que va a cubrir el tema y quiere “zafar” de la descripción superficial de lo ocurrido e indagar más, si tiene estos conocimientos de base, va a tener una preparación diferente frente a cualquier hecho de la realidad. Eso es un valor que tienen muchas de las carreras de Comunicación que yo no resignaría ante los cambios”, concluyó.