POTENCIAR LA CIENCIA
La UNNE avanza en el ordenamiento de sus estructuras de investigación

Con un balance altamente positivo, la UNNE trabajó este año en la implementación del «Reglamento de Estructuras de Investigación», una herramienta que unifica la normativa de funcionamiento de los distintos espacios en los que se hace ciencia en la UNNE, con el fin de propiciar y acompañar a un mejor logro de los objetivos de investigación.

En la Universidad existen diferentes estructuras de investigación como institutos, centros, laboratorios, observatorios, áreas, servicios, departamentos, grupos, entre otras modalidades de organización de la tarea científica de investigadores/as y personal de apoyo a la investigación que realizan actividades científicas y tecnológicas.

Si bien estos espacios sostienen una destacable producción científica en la UNNE, el funcionamiento de los mismos estaba encuadrado en distintos tipos de normativas.

En ese contexto, a mediados del año 2024, por gestión de la Coordinación de Institutos de Investigación se presentó y aprobó por Consejo Superior el «Reglamento de Estructuras de Investigación de la Universidad Nacional del Nordeste», con el objetivo ordenar las condiciones de creación y funcionamiento de los espacios científicos dentro de la Universidad de acuerdo con el marco normativo vigente, acompañando los Planes Estratégicos y Objetivos de Desarrollo Sustentable.

El nuevo reglamento establece como estructuras de investigación cuatro modalidades que son «Institutos», «Centros», «Laboratorios» y «Observatorios», y fija además las condiciones de funcionamiento, integración, recursos humanos, elección de autoridades, financiamiento entre otras disposiciones.

Con el fin de la puesta en vigencia del nuevo reglamento, a lo largo de 2025 se desarrolló un proceso de trabajo para la adaptación, a la nueva normativa, de los reglamentos internos de estructuras de investigación de las unidades académicas y de los institutos dependientes del Rectorado.

En esa línea, recientemente, durante la última reunión del año de la Comisión Consultiva de Ciencia y Técnica de la UNNE, se realizó un «positivo» de la implementación del nuevo reglamento, que demandó una tarea articulada entre la Secretaría General de Ciencia y Técnica (SGCyT), la Coordinación de Institutos de Investigación, las áreas de Investigación de las unidades académicas y referentes de los institutos dependientes.

«Estamos muy satisfechos con la creación del nuevo reglamento, un trabajo iniciado por la Dra. Rossana Gerometta, ex responsable de la Coordinación de Institutos de Investigación, y continuado por la Prof. Mónica Vargas, que permite poner un orden a las distintas estructuras que existen y que requerían de un reglamento unificado”, señaló la Dra. Laura Leiva, titular de la SGCyT.

Indicó que en la reglamentación se plasman los objetivos, composición y demás requerimientos para poder constituirse como centro, instituto, observatorio o laboratorio, “y no auto designarse sin un marco regulatorio».

Sostuvo que durante este año se logró realizar un importante avance, con activa colaboración desde las unidades académicas, que permite avizorar muy buenos logros para el año próximo.

«Es una máquina que empieza a caminar y quienes integran la UNNE entenderán el valor de contar con un marco reglamentario que, en primer lugar, defina qué debe ser ese conjunto de investigadores, como un paso necesario para, de manera posterior, optimizar el trabajo que se realiza en cada espacio», resaltó.

Reiteró que, generalmente, la modalidad de las estructuras se definían en forma autónoma o por medio de normativas diversas, «pero ahora tenemos en claro qué se requiere para ser un centro, instituto, laboratorio u observatorio».

«En nuestra facultad los grupos de investigación están adecuando sus realidades a la nueva NORMA» (Dra. Viviana Solis Neffa, Sec. de Investigación y Posgrado de FaCENA)

Logros y Proyecciones

La Dra. Mónica Vargas, de la Coordinación de Institutos de Investigación de la UNNE, recordó que el reglamento general entró en vigencia a principios de este año y en ese contexto se empezó el mencionado trabajo con todas las unidades académicas e institutos dependiente del Rectorado.

También destacó el esfuerzo y compromiso de los responsables de investigación de las facultades, así como de la comunidad científica en general que acompañó la propuesta.

Comentó que seis de las unidades académicas ya tienen sus propias reglamentaciones internas para sus estructuras, adaptadas al nuevo marco, y las demás presentan un importante grado de avance en ese objetivo.

Además de las perspectivas de que para el año próximo todas las unidades académicas tengan aprobada su normativa interna, también se espera que en 2026 las facultades e Instituto, empiecen a presentar al Consejo Superior las propuestas de creación formal de sus estructuras de investigación.

En ese aspecto, comentó que tres facultades ya tienen listos los proyectos de creación de sus estructuras para ser presentados a inicios del año entrante a sus consejos directivos, para luego remitirlos al Consejo Superior.

«Creemos que es un trabajo necesario, que permitirá visibilizar las estructuras, conocer las características de las mismas y acompañar iniciativas para potenciar sus actividades», consideró la Prof. Vargas.

Señaló que el ordenamiento de los espacios de investigación además de propiciar un mejor trabajo de quienes hacen ciencia, también representará mejores perspectivas para las demás funciones sustanciales de la Universidad, pues en estos lugares en los que trabajan grupos de investigación existe una directa relación con las actividades de docencia, extensión y transferencia el medio.

Reiteró que la mayoría de las estructuras de investigación venían funcionando muy bien, de manera organizada, pero sin una reglamentación unificada.

«Ahora nos ponemos todos bajo una misma normativa, que nos permite un mejor reconocimiento hacia adentro de la universidad y también hacia afuera, hacia la sociedad», opinó la Prof. Vargas.

“Nuestro instituto, en base a la normativa, trabajó en un reglamento interno para la creación de los Laboratorios Forenses que concentre la labor de distintos grupos” (Prof. Sandra Durand, Instituto de Ciencias Criminalísticas y Criminología).

 

Compromiso Institucional

Desde las distintas unidades académicas, durante la reunión de la Comisión Consultiva de Ciencia y Técnica, detallaron el grado de avance que presentan para la implementación del nuevo reglamento.

Comentaron que la normativa unificada a nivel de Universidad enriqueció los esfuerzos que en cada facultad o instituto se venía realizando para ordenar el funcionamiento de los espacios de investigación, objetivo que cuenta con el acompañamiento de quienes integran los distintos ámbitos de ciencia.

Asimismo, también expusieron las expectativas de poder en el año próximo avanzar de manera concreta en las presentaciones de conformación formal, según el nuevo marco normativo, de sus estructuras de investigación.

“EL REGLAMENTO permite reafirmar la realidad y situación de algunos espacios, redefinir otros y pensar en alternativas para la creación de nuevas estructuras” (Prof. Mercedes Oraisón, Sec. de Investigación y Posgrado – Facultad de Humanidades)

 

Las Estructuras de Investigación

La nueva reglamentación se fundamenta en que la Universidad tiene potestad de dotarse de unidades específicas que actúen como soporte de la investigación y de la docencia, pudiendo crear y ordenar los espacios necesarios para el ejercicio de sus funciones. Es menester así, tanto la regulación de las mismas como la adecuación de la normativa que las regula.

En ese aspecto, se definen las condiciones para la creación y funcionamiento de las estructuras de investigación afiliadas a la UNNE, que se conformarán de acuerdo a su grado de complejidad, que puede ser «Instituto», «Centro», «Laboratorio» y «Observatorio».

Según el nuevo reglamento, los «Institutos» son espacios dedicados a la investigación básica, aplicada y desarrollo experimental teniendo por finalidad la creación de conocimiento, innovación, vinculación, difusión y transferencia a la comunidad. Se configuran como espacios dedicados a la investigación con una función integradora de diversas áreas del conocimiento y un alto nivel de especialización científico-técnica. Pueden proporcionar asesoramiento de acuerdo a sus competencias.

Los «Centros» constituyen estructuras de investigación, transferencia y/o vinculación tecnológica que presentan una menor complejidad organizacional que los Institutos.

En tanto, los «Laboratorios» son ámbitos de investigación, transferencia y/o vinculación, dedicados a realizar actividades en condiciones controladas y llevar adelante tareas experimentales según los objetivos propuestos. Podrán pertenecer a estructuras mayores como Centros o Institutos.

Por último, se define al «Observatorio» como una entidad dedicada a la percepción, estudio y análisis de fenómenos naturales, científicos, sociales, artísticos o cualquier otro tipo de evento o situación de la realidad. Están especialmente diseñados metodológicamente para recopilar información, para obtener datos precisos y detallados sobre el fenómeno que están investigando a lo largo del tiempo, centrándose no solo en la observación de forma lineal, sino en alcanzar sistemas de referencia que contribuyan a la toma de decisiones.