El especialista en Nefrología, profesor Gonzalo Di Bernardo de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional del Nordeste reflexiona sobre esta importante fecha y aporta informaciones útiles para cuidar la salud.
El Día Mundial del Riñón, celebrado cada segundo jueves de marzo, es una fecha clave para reflexionar sobre la importancia de la salud renal y la prevención de enfermedades que afectan a estos órganos vitales.
Este año, bajo el lema «¿Están bien sus riñones? Detecte a tiempo y proteja la salud renal», se busca concienciar a la población sobre la detección temprana y la adopción de hábitos saludables para prevenir la enfermedad renal crónica (ERC), una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo.
El especialista en nefrología y docente adjunto de Medicina III de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional del Nordeste y Coordinador de la Unidad Renal Corrientes, Gonzalo Di Bernardo, destaca que la ERC es una enfermedad silenciosa que puede avanzar sin síntomas evidentes hasta etapas críticas.
«La detección temprana es nuestra mejor herramienta para combatir esta enfermedad. Muchas personas no son conscientes de que están en riesgo, y cuando los síntomas aparecen, el daño renal ya es significativo», señala el profesional.
Entre los factores de riesgo más comunes, menciona la hipertensión arterial, la diabetes y la obesidad, condiciones que pueden ser controladas con un estilo de vida saludable.
También subraya la importancia de la educación y la prevención especialmente en los primeros niveles de atención. «Es fundamental que las personas comprendan el papel crucial de los riñones en el cuerpo. Estos órganos no solo filtran toxinas, sino que también regulan la presión arterial y contribuyen a la producción de glóbulos rojos. Cuidarlos es esencial para nuestra calidad de vida», explica.
Además, recomienda realizar chequeos médicos regulares, especialmente para quienes tienen antecedentes familiares de enfermedades renales o padecen condiciones como diabetes. “Una sola consulta anual es más que suficiente, no es que va a depender de hacer una consulta seriada varias veces en un año”, remarca.
Entrevista al Profesor y especialista en Nefrología: Gonzalo Di Bernardo
¿Qué es el día Mundial del Riñón?
-El Día Mundial del Riñón surge como una iniciativa en realidad de las sociedades internacionales con el objetivo de hacer visible la gran problemática que representa hoy la enfermedad renal.
-En líneas generales, en el último tiempo, la enfermedad renal se encuentra dentro de las 10 causas de mortalidad más importantes y se estima que para el 2030-2035 va a estar dentro de las 5 más importantes.
-La enfermedad renal la mayoría de las veces es secundaria a otras enfermedades dentro de lo que son las enfermedades cardiovasculares que lideran ese ranking de mortalidad seguida por, las enfermedades infecciosas, obviamente la diabetes y las enfermedades oncológicas, todas en algún punto van a terminar afectando el riñón y de esa manera agregar más riesgo a la persona que la padece.
¿Cuáles serían las causas?
-Dentro de las causas a nivel mundial, tanto la hipertensión como la diabetes por su lado son las causas más frecuentes de enfermedad renal. Pero también existen otros factores de riesgo que terminan generando afectación de la función renal, como en muchos casos el abuso de analgésicos que hoy día es tan frecuente en la población general.
-Ciertas medicaciones o asociación de medicaciones también pueden terminar comprometiendo esa función y agregar todavía más riesgo a la persona.
-Se estima en realidad que una persona, un adulto joven portador de enfermedad renal avanzada representa o tiene una carga de riesgo equivalente a una persona de más de 70 años portadora de cardiopatía, hipertensión y diabetes para dar un poquito la importancia de lo que representa la enfermedad renal en el compromiso de los vasos sanguíneos.
¿En qué momento llega el paciente a la consulta?
-A veces tarde y justamente esta campaña, esta semana Renal conmemorando el Día Mundial del Riñón tiene por objetivo evitar el retraso en la consulta.
-Entonces, lo que se busca es concientizar a la población de tener presente si son portadores de hipertensión, diabetes, problemas del corazón, colesterol o más aún, si los padres de la persona que por ahí no se conoce enferma de nada son hipertensos, son diabéticos o hay antecedentes de enfermedad renal en la familia es prudente que realice una consulta con un especialista en nefrología de manera temprana.
¿Una persona que detecta la enfermedad puede convivir con el tratamiento?
Sí, totalmente, con la detección temprana y con los adelantos en el tratamiento, los pacientes pueden llevar una buena calidad de vida, pero justamente una de las problemáticas que representa el retraso en el diagnóstico de la enfermedad renal es que, al igual que con la presión y con la diabetes, cuando se empiezan a desarrollar no producen ningún síntoma.
-Entonces la persona no siente nada y no tiene motivo por el cual iniciar una consulta con un especialista. Lo mismo pasa con la enfermedad renal. Los primeros estadios, incluso un estadio moderado, no van a tener síntomas.
-El chequeo se realiza en base a controles periódicos de presión, controles de azúcar y un examen básico de orina en el que buscamos que exista o no la presencia de proteínas en la orina o de sangre en la orina y un laboratorio básico de función renal en sangre. Nada más.
¿Qué es diálisis y cuál es la situación?
-Diálisis es: terapia de reemplazo renal y, algo que se pondera mucho a nivel mundial, es que tenemos un registro muy fidedigno, en Argentina, por lo menos en los últimos 20 años, de todos los pacientes a nivel nacional que se encuentran realizando diálisis o terapia de reemplazo renal. En Corrientes aproximadamente existen actualmente cerca de 700 o 800 pacientes en esta situación.
Pero a nivel nacional, los últimos registros hablan de que hay cerca de casi 900.000 personas con enfermedad renal dentro de las cuales la gran mayoría están en estadio intermedio y todavía se están implementando nuevos programas a nivel nacional, como el programa de ERC, en el cual se pretende justamente a todos los especialistas que tenemos atención ambulatoria de pacientes, registrar a esos pacientes en un sistema para mejorar las estadísticas y eso sirve como fundamento para generar programas de prevención, o sea mayor capacitación principalmente a lo que es la primera línea de atención, para mejorar las medidas generales y evitar el mayor desarrollo de enfermedad renal.
¿Cómo no llegar a esa situación?
El secreto está en la prevención, porque muchas veces el tratamiento de la enfermedad renal va directamente asociado con las enfermedades bases.
¿La gente tiene miedo a la diálisis?
Es así, la gente le tiene mucho miedo a la diálisis, pero es un tratamiento que se puede llevar tranquilamente, no es culpa de la población, pero son los mitos o lo que se dice.
Toda persona que su médico de cabecera en algún punto le dice, usted tiene que hacer una consulta con un especialista en nefrología, lo primero que hace es o buscar en internet o haber escuchado de algún vecino, familiar, primo conocido y lo relacionan directamente con la diálisis. Entonces, hoy día decir diálisis para mucha gente es decir mala palabra.
Mi consejo es que esa realidad y gracias a todos los avances que hay en la tecnología de los últimos 40, 50 años, hicieron que la diálisis hoy sea completamente distinta a lo que era en sus orígenes.
Hoy en Corrientes, si no fuese por la diálisis, esas 700 personas que están bajo tratamiento hoy no estarían vivas. Nosotros por ejemplo, en la Unidad Renal en el cual trabajo, tenemos pacientes desde los 24 años hasta los 83. Toda esa variedad, ese abanico de edades y muchos de ellos, o los más jóvenes, por lo menos los que están en edad laboral, van a trabajar, salen, vienen a hacer su tratamiento y se van a la casa o al revés.
¿Qué tiempo le ocupa la diálisis al paciente?
Lo que se le dice a la mayoría de los pacientes que ingresan a una terapia de diálisis es que es un camino transitorio y que al igual que uno toma una pastilla todos los días, la diálisis tiene su programa establecido, que son individualizados para cada paciente, pero en promedio, tres veces por semana, cuatro horas en días alternos. Pero siempre se le dice, o sea, es un camino transitorio hasta que ellos puedan acceder a un trasplante renal, que ese sería el camino final para poder dejar de depender de la diálisis.
¿Hubo avances en los tratamientos últimamente?
Sí, hoy los equipos que se están trabajando justamente lo que buscan es mejorar la calidad de limpieza de sangre, que es básicamente lo que hace la máquina de diálisis, darle más estabilidad a lo que es la variación de presión durante el tratamiento y más confort al paciente, o sea, básicamente el paciente se puede llegar a encontrar cuatro horas sentado en un sillón, hablando con el compañero de la misma sala, mirando la tele o leyendo un libro, escuchando la radio y literalmente no siente nada durante ese tiempo.
Para cerrar, una recomendación por favor
-Control de salud, o sea, el objetivo de la medicina es prevenir la enfermedad.
No esperemos a sentirnos mal para ir a una consulta, preguntar en la familia, indagar sobre antecedentes importantes, repito, presión en la arteria, el azúcar en la sangre, colesterol, problema de corazón o enfermedad renal que haya habido previamente y que esos ya son indicios, factores que están presentes que se sugeriría la consulta con el especialista.