En la sesión del miércoles 14 de agosto el Consejo Superior de la Universidad Nacional del Nordeste expresó su profunda preocupación ante el alarmante y crítico deterioro salarial que sufren docentes y no docentes de las Universidades Nacionales.
Esta es una preocupación compartida por toda la comunidad de la UNNE en particular por los representantes gremiales docentes de CODIUNNE, ADUIUNNE, Nodocentes de ATUN y estudiantes agrupados en la Federación Universitaria del Nordeste -FUNE.
Desde noviembre de 2023 el salario de los trabajadores docente y nodocentes ha caído un 45% frente a una inflación que ha superado el 120%.
La situación es muy difícil para los trabajadores de menor antigüedad y de los docentes con dedicación simple que representan el 80% de los docentes, ubicando a muchos de ellos por debajo de la línea de pobreza ya que desde diciembre de 2023 no se ha actualizado la garantía salarial.
A la mencionada situación salarial debe sumarse la cancelación del FONID, recortes en programas de asistencia a estudiantes, falta de actualización de los montos de becas estudiantiles, y de investigación.
La pérdida del poder adquisitivo ha impactado significativamente en la calidad de vida de los trabajadores universitarios, comprometiendo su dedicación y compromiso con la institución.
Por otra parte, el deterioro salarial ha puesto en peligro el funcionamiento del Instituto de Servicios Sociales de la Universidad – ISSUNNE, con el perjuicio en los servicios de salud que presta el mismo a los trabajadores de la Universidad frente al importante aumento de los costos de las prestaciones.
Ante esta situación, que afecta a millones de trabajadores en todo el país, y que pone en grave riesgo la sostenibilidad de la universidad pública y su capacidad para cumplir su misión, el pasado mes de julio, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), las representaciones gremiales y la Federación Universitaria Argentina (FUA) emitieron en conjunto un comunicado alertando sobre la situación crítica que atraviesan los salarios no docentes y docentes.
Del mismo modo que no hay universidad sin recursos para enfrentar erogaciones básicas para su funcionamiento, mucho menos la hay si docentes y nodocentes no perciben un salario digno acorde a su responsabilidad.
Reiteramos nuestro compromiso con las acciones que se llevan adelante desde el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) para impulsar una urgente recomposición salarial a través de paritarias libres, que permita recuperar el poder adquisitivo, con el objetivo de garantizar las condiciones laborales acordes a la misión de la Universidad Pública.
De la misma manera reafirmamos nuestro compromiso de apoyar y defender los derechos de los estudiantes, docentes, no docentes y de toda la comunidad que integra, la Universidad Pública.
Hacemos también un llamado a la comunidad universitaria, a los estudiantes, graduados y a la sociedad en general, a unirse en este pedido por una universidad pública de calidad.
Por ultimo hacemos un llamado a las autoridades nacionales a trabajar de manera conjunta con la comunidad universitaria para encontrar soluciones sostenibles a esta problemática.
La inversión en educación superior es una inversión en el futuro de nuestro país, y es fundamental garantizar que quienes se dedican a esta noble tarea cuenten con las condiciones necesarias para desempeñar sus funciones de manera adecuada.
La educación superior es un derecho y una inversión fundamental para el desarrollo del país.
La universidad pública es un bien común que debe ser protegido y fortalecido.