Un equipo interdisciplinario de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), en vinculación con el Gobierno de la Provincia de Corrientes, puso en marcha un proyecto para la elaboración de códigos urbanos-ambientales en seis localidades de la zona del Iberá, con el fin de optimizar la preservación del patrimonio histórico, arquitectónico y del recurso natural.
El proyecto «Código urbano ambiental para localidades del macrosistema Iberá» es una iniciativa enmarcada en la línea de trabajo conjunto entre la UNNE y el Gobierno de Corrientes que tiene como eje estratégico el desarrollo sustentable del Iberá.
La propuesta pretende contribuir en la elaboración para seis localidades del entorno Iberá, de códigos urbanos de protección de cuestiones ambientales, patrimoniales y generales que permitan atender de manera debida el crecimiento que experimentan estas ciudades producto del desarrollo de la región Iberá como polo turístico.
Además, se busca proponer estrategias, programas, planes y proyectos prioritarios, así como normativas municipales complementarias, que contribuyan al cumplimiento de los códigos en cada localidad y para abordar la política de desarrollo sustentable, ordenado y eficiente.
En una primera etapa se trabajará en las localidades de Chavarría, San Miguel, Caá Catí, Loreto, Concepción y Mantilla, que fueron seleccionadas por el Gobierno de la Provincia de Corrientes teniendo en cuenta el nivel de avance de los planes de ordenamiento territorial que se realizaron en esas localidades y que tienen la base para avanzar en la redacción de los códigos urbanos-ambientales.
El proyecto toma como punto de partida y base documental los “Planes de Ordenamiento Urbanos” desarrollados por el Ministerio de Coordinación y Planificación de la Provincia, donde los “Códigos de Planeamiento urbano ambientales” (CPUA) tienen como finalidad traducir y expresar con claridad, las estrategias que tienden a dar solución a las situaciones planteadas en el Diagnostico y las propuestas del Plan Urbano Ambiental.
Relevancia
El proyecto está integrado por un equipo de especialistas de distintas unidades académicas de la UNNE, bajo la responsabilidad institucional de la Arq. Mgter. María José Roibón, de la Coordinación de Desarrollo Sustentable y Transición Ecológica de la UNNE (CoDeSTE), y la coordinación técnica de la Dra. Valeria Schneider.
«La propuesta tiene como fin encarar las acciones destinadas a mejorar la calidad de vida de la población, a brindar una mayor eficiencia en el funcionamiento de las actividades públicas y privadas, una efectiva administración de la jurisdicción municipal y la previsión de un ordenado desarrollo urbanístico de la localidad» explicó la Mgter. Roibón.
Comentó que la intención es poder avanzar antes de fin de año con propuestas para cada localidad, que posibiliten la redacción de códigos urbanos ambientales en vinculación con instrumentos y criterios definidos por el Gobierno provincial y el Comité Iberá para el desarrollo de la gran macroregión del Iberá.
Recordó que un código urbano es una herramienta que tiene un municipio para establecer como debe organizarse el territorio en su totalidad y en la zonificación por áreas, distritos, barrios y otros espacios demarcados con fines específicos, usos permitidos, niveles de densidad y distintas escalas de qué se puede construir, que no se puede construir y hasta dónde se puede construir.
Detalles del trabajo
En el caso de la región Iberá, se trabajará con dos componentes fundamentales, uno relacionado con una cuestión muy sensible que es la ambiental y la otra referida con la cuestión patrimonial, porque estas localidades tienen además áreas, construcciones y otros componentes urbanos de valor histórico-patrimonial que requieren ser protegidos.
En la mencionada primera etapa del proyecto, en acuerdo con el Gobierno provincial, se pondrá el foco en la preservación arquitectónica patrimonial y la vinculación con el medio ambiente y la naturaleza.
Para el trabajo en las seis primeras localidades incluidas en el proyecto, se conformaron dos grupos de trabajo, uno destinado a Caá Catí, Loreto y San Miguel, y otro para Concepción, Mantilla y Chavarría.
Cada equipo está conformado por un especialista en patrimonio y dos especialistas en cuestiones urbanas constructivas, un dibujante para la expresión gráfica de los códigos, y demás integrantes con formación en campos afines al ordenamiento territorial.
Vinculación
«Creemos que el proyecto es una muestra del potencial que tiene la vinculación entre la Universidad, el Gobierno Provincial y los municipios, en este para atender una cuestión estratégica como el ordenamiento territorial en la zona de Iberá» indicó la Mgter. Roibón.
Destacó que el trabajo colaborativo con los municipios será clave para el avance de la propuesta, y que consideran que representará un salto cualitativo en materia de planificación urbana para el desarrollo sustentable en la región Iberá y la provincia.